La IV Cumbre CELAC–Unión Europea tendrá este año un ingrediente histórico: la participación directa de la sociedad civil. Representantes de más de 200 organizaciones de América Latina, el Caribe y Europa presentarán ante los jefes de Estado la Declaración de la Sociedad Civil, un documento que propone construir una cooperación birregional basada en la justicia social, la equidad y la sostenibilidad.
El texto recoge la visión de una ciudadanía global que pide reorientar la cooperación hacia una agenda más justa e inclusiva. Los encargados de presentarlo serán Inma Alonso, de la Coordinadora de Organizaciones para el Desarrollo de España, y Andrés Rodríguez, de Youth Sounding Board Colombia, quienes llevarán la voz colectiva a la ceremonia de mandatarios que se realizará este domingo en Santa Marta.
Durante el Foro de Sociedad Civil ALC–UE, celebrado como antesala de la cumbre, el viceministro de Asuntos Multilaterales, Mauricio Jaramillo Jassir, destacó la importancia de fortalecer el multilateralismo con participación social efectiva. “Esperamos de la sociedad civil que nos ayude a construir una gobernanza compartida, una diplomacia de los territorios, que supere la visión centralista de las relaciones internacionales”, afirmó.
La Declaración de la Sociedad Civil es el resultado de un amplio proceso participativo que involucró a movimientos juveniles, de mujeres, pueblos indígenas, comunidades afrodescendientes, población LGBTQ+, sindicatos y colectivos climáticos. En diez ejes temáticos, aborda asuntos como los derechos humanos, la justicia climática, la equidad de género, la inclusión social y el financiamiento sostenible.
El documento plantea una visión de cooperación que ponga en el centro a las personas y no únicamente a los Estados, priorizando la participación ciudadana y la rendición de cuentas. Para los firmantes, la transición ecológica, la redistribución económica y la defensa de los territorios deben convertirse en pilares del nuevo pacto birregional entre Europa y América Latina.
Durante el foro, el viceministro Jaramillo también resaltó el compromiso del Estado colombiano con una agenda ambiental y social compartida: “Hemos sido un país activo en la transición energética y la descarbonización, y hemos encontrado en nuestros pares europeos un eco ideológico que refuerza nuestra apuesta por la defensa de la naturaleza y de la vida”.
Con la entrega de este documento, la sociedad civil reafirma su papel como actor político global. Su participación en la Cumbre CELAC–UE marca un hito en la historia del diálogo birregional, recordando que la cooperación internacional no puede construirse sin las voces de quienes viven en los territorios y enfrentan de primera mano los desafíos sociales y ambientales.
El Foro de Sociedad Civil ALC–UE se consolida así como un espacio de incidencia y articulación transnacional, desde el cual las organizaciones de ambos continentes promueven un modelo de desarrollo más equitativo, participativo y humano. En Santa Marta, la diplomacia encontró su contraparte ciudadana: una alianza de pueblos que reclaman un futuro compartido y sostenible.
