La Fiscalía General de la Nación confirmó la desarticulación de una organización delictiva señalada de promover un sofisticado esquema de estafa a través de plataformas falsas que simulaban inversiones en acciones y activos digitales. Con publicaciones atractivas en redes sociales, los presuntos responsables lograban captar la atención de ciudadanos en Colombia, Chile y Perú, a quienes ofrecían supuestos retornos rápidos y seguros, pero terminaban despojando de sus ahorros.
Según la investigación, el contacto con las víctimas se realizaba por vía telefónica, donde los supuestos asesores financieros convencían a los usuarios de transferir entre 200 y 250 dólares como primer requisito para ingresar al negocio ilícito. Una vez dentro, los afectados eran inducidos a entregar más dinero con la promesa de elevar sus ganancias. Los pagos, sin embargo, nunca fueron invertidos ni respaldados por operaciones reales.
Los elementos materiales probatorios mostraron que los estafadores creaban gráficas ficticias sobre avances, utilidades y movimientos del mercado, información que compartían periódicamente para ganar credibilidad y mantener la confianza de los afectados. Adicionalmente, advertían que no podían retirarse del sistema hasta cumplir supuestos ciclos financieros, reforzando así el engaño y la presión psicológica.
Otro hallazgo clave fue la instrucción que recibían las víctimas para instalar en sus dispositivos herramientas como Anydesk o Imperios, presentadas como aplicaciones para monitorear inversiones. En realidad, estos programas permitían a la red tomar el control remoto de celulares y computadores, acceder a claves personales y manipular productos bancarios sin autorización de los usuarios.
Entre 2021 y octubre de 2025, la organización habría logrado apropiarse de más de 71.000 millones de pesos mediante este modelo de fraude digital. La Fiscalía identificó a sus integrantes tras una extensa investigación que permitió rastrear movimientos financieros, comunicaciones internas y la estructura operativa del call center donde se ejecutaba el esquema.
En total, 14 presuntos integrantes de la red fueron capturados y puestos a disposición de un juez de control de garantías. Un fiscal de la Dirección Especializada contra los Delitos Informáticos imputó a los investigados los delitos de estafa por medios informáticos, hurto por medios informáticos, violación de datos personales —las tres en modalidad de delito masa— concierto para delinquir, lavado de activos y enriquecimiento ilícito. Ninguno aceptó los cargos.
Entre los implicados figuran el presunto cabecilla, el ciudadano mexicano Alejandro Maximiliano Ronquillo Treviño, alias Daniel; José Mauricio Murcia Martínez, alias Murcia, señalado de mover los recursos ilícitos; y Daniel López Uribe, abogado acusado de crear sociedades fachada. También fueron judicializados los managers y asesores del supuesto call center: Jefferson Duván Sánchez Lopera, Valentina Galvis Quintero, Robert Cepeda Orozco, Juan Carlos González Alian, María Paula Gonzáles Rojas, Rodolfo Andrés Cepeda Orozco, Andrés Felipe Villada Trujillo, Yudy Viviana Tabares Gonzáles, Paula Andrea Londoño Isaza, José Simón Mosquera Muñoz y Juliana Tabares León.
Por decisión del juez de control de garantías, tres de los procesados deberán cumplir medida de aseguramiento en centro carcelario, mientras que los demás permanecerán privados de la libertad en sus lugares de residencia mientras avanza el proceso penal. La Fiscalía reiteró su llamado a denunciar fraudes digitales y a desconfiar de plataformas que prometan ganancias rápidas sin respaldo verificable.
