El retail colombiano vive una paradoja: mientras el comercio minorista repuntó 10% interanual en junio de 2025 y el e-commerce cerró 2024 con más transacciones y mayor ticketpromedio, la cadena de suministro aún opera con cuellos de botella y brechas tecnológicas que erosionan márgenes y experiencia del cliente. En el Índice de Desempeño Logístico 2023, Colombia se ubicó en el puesto 66 de 139 países, evidencia de un sistema que avanza, pero no a la velocidad que exige el consumidor digital de hoy.
La inteligencia artificial (IA) está cambiando ese libreto, sobre todo en la gestión de inventarios: donde antes dominaba la reposición reactiva y las planillas estáticas, hoy irrumpen pronósticos de demanda que se recalibran en minutos, visión computacional para detectar quiebres de anaquel y algoritmos que afinan el stock de seguridad por tienda, SKU (Stock Keeping Unit) y franja horaria. Estudios sectoriales muestran que la IA puede recortar inventarios en 20–30% y reducir errores de planeación en la cadena entre 20–50%, con efectos directos en disponibilidad y ventas.
¿Por qué importa en Colombia? Porque el mercado combina crecimiento digital con fragilidades estructurales: las ventas online aumentaron 13.5% en valor en 2024 y se proyecta otro salto en 2025, pero buena parte del comercio sigue anclado a procesos manuales y visibilidad limitada entre centro de distribución y tienda. La consecuencia es conocida: sobreinventario en unos nodos, desabastecimiento en otros y capital de trabajo inmovilizado.
De acuerdo con el informe de SAP, 69% de las empresas colombianas proyectan un impacto significativo de la IA en su sector, y el 54 % planea incrementar su inversión en IA durante 2025. En el sector de Consumo y Retail, solo un 20% ya ha integrado IA en su estrategia, aunque 58% aplica IA para gestión de inventarios y abastecimiento.
Tres palancas de IA están acelerando la curva de madurez:
- Monitoreo inteligente de disponibilidad en anaquel: Utilizando IA y machine learning, detecta en tiempo real quiebres, productos fuera de planograma o precios incorrectos, activando tareas correctivas de forma automática.
- Gestión proactiva de inventarios: Convierte los datos de ventas e inventario en acciones concretas y priorizadas para cada tienda, reduciendo sobrestock y evitando pérdidas por desalineaciones entre inventario y exhibición.
- Análisis comercial avanzado: Ofrece tableros de control y reportes listos para usar con KPIs clave, comparativos de ventas, seguimiento de promociones y performance por cadena, tienda, producto o promotor.
En palabras de Sergio Della Maggiora, Director General de Teamcore: “La gestión de inventario con IA ya no es una ventaja competitiva, es una condición para sobrevivir. En Colombia, vemos que quienes integran inteligencia artificial y machine learning en sus procesos no solo mejoran la disponibilidad en anaquel, sino que reducen drásticamente las pérdidas por quiebres y mermas. La tecnología permite detectar anomalías en tiempo real y activar correcciones inmediatas, lo que antes tomaba días o semanas. Esa agilidad es la que define al retail ganador en esta década”.
El contexto regulatorio y empresarial empieza a alinearse: el país adoptó en 2025 una nueva política pública para impulsar capacidades de IA, y encuestas recientes sugieren que las grandes organizaciones colombianas están acortando los tiempos de implementación —más de la mitad dice haber desplegado proyectos en menos de seis meses—, una ventana de oportunidad para pasar del piloto al impacto a escala.
Nada de esto es automático. La revolución del inventario requiere datos limpios, gobierno de la información, rediseño de procesos y nuevos incentivos en tienda. Pero el caso de negocio es nítido: menos capital inmovilizado, menos pérdidas por quiebres y mermas, y una promesa simple para el consumidor colombiano —“si lo ves, lo tenemos”— que hoy marca la diferencia en un mercado. La IA no sustituye el oficio del comerciante; le devuelve el tiempo y la precisión para competir en serio.